No es un texto cualquiera, no es una canción cualquiera, no era una cualquiera.
"Hoy no tengo la cabeza como para escribir una genialidad, pero tu tampoco tuviste esa chispa necesaria el día que firmaste ese contrato en la servilleta de aquel bar, ya hace un año, delante de un café frío que sin embargo estaba ardiendo, ardía el deseo, la necesidad de ir al lavabo y con los ojos cegados comernos.
Ese mismo día me llenaste el cuerpo y los bolsillos de todos mis pantalones preferidos de semillas, las guardé unos días en mi mesilla, mientras me seguías alimentando de besos desenfrenados y vaivenes, lo que inevitablemente me llevó a doctorarme en tu sonrisa y a plantar y mimar las semillas que te encargabas de administrarme como si fuera mi dosis médica cada medianoche.
Las aboné, les acaricié e incluso les puse mi canción favorita mas de una vez al día, pero ellas seguían a lo suyo, en su tierra había frío, olía a diciembre, a resignación, a desilusión, incluso se apreciaba un olor a plástico, tanto en mi historia contigo, como en tus semillas."
Y enredao’ en tu vientre, como una serpiente,
cansao’ de este desierto.
Harto de la gente, he pensado siempre:
“estáis todos tan muertos”.
¿Te presto un poco de tipec para tapar las heridas? No desaparecen pero por lo menos te deja a revivir encima de ellas. Beijinhos.
ResponderEliminarespero que éste no sea uno de esos casos en los que "la realidad supera a la ficción"...
ResponderEliminar¡demasiado desaparecido está usted señor Borao! (ahora estamos todos en twitter...)
Me ha recordado a cuando de chica plantaba lentejas entre algodones, con los mejores cuidados y los mejores mimos, y al final, por el motivo que fuera, se me acababan muriendo...
ResponderEliminarEn cualquier caso, espero que sea un texto ficticio! ;)
Buen veraaano, señor poeta!
Jo, espero que no sea el reflejo de como estás tu!
ResponderEliminarPuf por la cabeza me pasa más de un comentario:
ResponderEliminar" al menos podrás trabajar de jardinero, aprendiste a mimar las semillas"
" a veces venden semillas defectuosas que jamás crecen"
" tal vez el problema no fue tuyo, tal vez no le daba luz suficiente"
Quédate con lo que quieras, y si no quieres nada, a otra cosa. Un beso
Me ha encantado, qué bien encontrarte :)
ResponderEliminarUn saludo.
mucho ánimo...
ResponderEliminarNo todo lo que cuidas florece, a veces la semilla no es tal, sino muertas virutas de madera seca.
ResponderEliminarUn beso
tristes borrones cuando las historias nos rompen los sueños a mitad...
ResponderEliminarHola, aveces tanto cuidamos las semillas que germinan mal, espero que te encuentre mejor de lo que parece, te deseo lo mejor. Besiños Milita.
ResponderEliminarMuy hermoso escrito,buen blog.
ResponderEliminarCarpe Diem(aprovecha el día)
Si la planta se marchito, no fue unicamente tu culpa..
ResponderEliminarPara doctorarse en una sonrisa hace falta conocerla a fondo.. por muy pronto que llegue diciembre.
ResponderEliminarBonita entrada poeta :)
Gracias por pasarte, aunque no calma las altas temperaturas. ;)
ResponderEliminarYo voy tirando; ya me queda menos para coger las vacaciones. ¿Qué tal te va? Beijinhos.
El verano, bueno, está siendo raro, me siento como estancada e improductiva, mezclado con la melancolía de no saber muy bien por dónde coger ahora.
ResponderEliminarEspero que en septiembre todo vuelva a ser normal.
curioso eso de los contratos en servilletas..
ResponderEliminar:)
un besote!
No te has equivocado; he hecho referencia a Zaragoza en alguno de mis textos, seguramente lo has dicho por eso. ;)
ResponderEliminarApuntado en la agenda. Beijinhos.
Como siempre, un placer pasarse por aqui
ResponderEliminarpor eso creo que las servilletas son mas que para limpiar, me gusto tu blog, un abrazo. firmado en una servilleta!
ResponderEliminarinteresante..., bonitas palabras!
ResponderEliminarsaludos