miércoles, 23 de febrero de 2011

experimentos con gaseosa

Días sin pasar por aquí, sin dar noticias desde la Botella, días siendoles infieles, debería excusar a Poetadebotella ya que me consta que tuvo un odioso a la par que interesante examen de Psiquiatría, un genial concierto de Rulo en el que esta vez hubo mas de 10 fotos y cubatas con él (esta vez en Huesca), y que el 21 de este mes de febrero, hizo 21 años con una magnífica celebración-sorpresa con globos, pastelitos, etc!:)
Pero tranquilos, no se me vayan a asustar me ha comunicado que no ha madurado nada de nada, a pesar de cumplir años...y que en breve volverá a estar por aquí con sus textos incomprensibles...
ah! se me olvidaba decir que tambien me pidió que les agradeciera esos 70 comentarios de la anterior entrada...sisi, 70! gracias por estar siempre ahí! ;)



No voy a descubrir nada, confieso que esta "aventura" la he visto en otros blogs, pero me parece super interesante a la par que genial...consiste en poner el principio de una historia, y que vosotras/os propongaís un final, a vuestro gusto, lo que os apetezca y con vuestra forma de escribir...también podeis ponerle título si os apetece!:)
El final elegido será publicado en la siguiente entrada, si me dais ese permiso claro está!:D



Comienzo....

Mi nevera estaba mas vacía que mi estómago, era tarde, miércoles, y por si fuera poco llovía, pero aún así decidí buscar un restaurante donde saciar mi apetito, tras pisar un par o tres de charcos por descuido o por diversión, entré en un establecimiento famoso por su tortilla de patata, decidido a pedir todo, menos tortilla de patata!

Mientras miraba la escasa carta, de reojo reparé en alguien, no me negarán ustedes que derramar (por equivocación o por acierto) unas gotitas de vino tinto sobre la camisa blanca e inmaculada, es un signo de distinción, personalidad, de romper con lo establecido y de ser una persona apetecible, o al menos de conocer...


...como acabará este cuento? eso os lo dejo a vuestro libre albedrio!:)